Diario hablado

EL REINO DE LAS VOCES

El tema principal de este texto es la radio, pero sobre todo se centra en el lenguaje radiofónico, se habla sobre todo de la palabra, la voz que la difunde. También tiene cierto punto histórico al hacer referencia a la época franquista, a la cadena pirenaica que he de suponer (aparte de lo que pone en el texto sobre los himnos prohibidos de la libertad) que sería una cadena revolucionaria, ya que en esa época hubo grandes revueltas en la zona norte de España por parte de los mineros. También habla de cómo la palabra y la voz del locutor despierta una serie de emociones en el oyente.

Un breve resumen de la historia: La narra una persona que no se sabe si es hombre o mujer. Comienza contando cómo era la radio hace años, un trasto grande situado en una repisa, después cuenta cómo al acabar la retrasmisión se escuchaba la voz del general Franco, por lo cual se descubre que habla de la época de entre los 40 y los 70. Después habla de una cadena de la época llamada “la pirenaica”; habla de la voz del locutor. Se imagina que está retransmitiendo desde una torre en mitad de las montañas; sin embargo, tras escuchar una entrevista a ese mismo locutor (pero en la actualidad) descubre que realmente retransmitía desde Bucarest. También descubrió que todo lo que decían en esa cadena era falso, que lo que comentaban era cómo se imaginaban ellos España. Ahora es cuando comienza a hablar de la “melancolía”, de cómo recuerda lo que queda de su antiguo mundo, y lo poco que le queda de ese mundo son esas voces que ansiaba escuchar en la radio.

Se trata de una narración, su narrador es realmente al mismo tiempo el protagonista de la historia, por tanto sabe cómo se siente y cómo piensa. Estamos hablando de una  especie de novela, pero como si se tratase de un diario (como “el diario de Ana Frank”). También se habla de otros personajes como el padre de esta persona, y aunque no dice a quién se refiere (madre, hermano…) dice: cuando estábamos todos acostados, por tanto había más personas en la casa.

Antonio Muñoz Molina estudió en las Escuelas Profesionales de la Sagrada Familia (SAFA) durante la infancia, y luego bachillerato en el colegio salesiano Santo Domingo Savio y en el instituto San Juan de la Cruz de Úbeda. Siguió historia del arte en la Universidad de Granada y periodismo en la de Madrid. En los años ochenta se estableció en Granada, donde trabajó como funcionario y colaboró como columnista en el diario Ideal; su primer libro es una recopilación de esos artículos y aparece en 1984 con el título El Robinsón urbano. Ganó el premio Planeta en 1991.

Yo creo que su intención es hacer una especie de tributo a la radio, que en su época era lo único que te mantenía informado ya que había tv pero casi nadie se la podía permitir.
En mi opinión el texto está muy bien, habla de la radio pero sobre todo intenta transmitir una sensación de melancolía. También me ha gustado que haga referencia a temas de historia.